martes, 22 de septiembre de 2009

Función fática

A nuestra edad la dinámica de las relaciones toma otro rumbo.
Hemos perdido los ímpetus del adolescente, y ya no confiamos
en la totalidad del amor, aunque tampoco confiamos en las
posibilidades limitadas de nuestros cuerpos. Siempre todo
termina por fastidiarnos.

1 comentario:

edegortari dijo...

Así es mano, siempre. Ya no escribes ni pasas por nuestros blog: nos has abandonado. Aún piensas visitar aca en dieicembre? Ya hasta Daniel se está consiguiendo vieja por tu abandono. Espero estés bien. Abrazos.